Esta sala lleva el nombre del que fué el primer presidente del Museo de Máquina Herramienta de Elgoibar. La exposición hace un recorrido histórico de nuestra tradición industrial y de la empresa Estarta y Ecenarro. En esta sala se exponen diferentes modelos de máquinas de coser Sigma fabricadas por la empresa elgoibarresa. También se pueden ver máquinas de coser de fabricación nacional e internacional, como Alfa, Singer, Titania Kay & Co, entre otros.
Al término de la Guerra Civil, en 1939, los gestores de “Estarta y Ecenarro” decidieron abordar la fabricación de máquinas de coser Sigma, aprovechando que la empresa Alfa de Eibar fue incautada por su gran significación republicana y socialista. Su plantilla había huido, estaba encarcelada o había muerto y la maquinaria se encontraba dispersa.
La empresa elgoibarresa acudió al especialista alemán Kart Rübel Wirt, que participó en el diseño y fabricación de la máquina de coser Alfa. Estarta y Ecenarro se trasladó a Olaso donde construyeron nuevos pabellones para la fabricación de máquinas de coser. En su fabricación la labor de la mujer fue fundamental en los procesos de montaje y acabado de la misma. Por otra parte, Estarta y Ecenarro no dejó de fabricar máquinas herramienta.
La primera máquina de coser se comercializó bajo el nombre de “Cima” pero al poco tiempo la empresa elgoibarresa se vió obligada a cambiar el nombre de la marca dado que un relojero suizo tenía la patente de “Cyma” para sus relojes.
Sigma exportó a más de 50 países de todos los continentes con organización propia e importantes Agentes distribuidores en Inglaterra, Alemania, Holanda, Francia y otros. Sin embargo, su pujanza se vio truncada por la creciente oferta de ropa confeccionada que contribuyó a que las amas de casa empezaran a dejar de coser en el hogar. La demanda de máquinas de coser cayó en picado y en el año 1995 se cierra la empresa Estarta y Ecenarro.